Mrs Dallowey -Virginia Woolf

  • Editorial: Ediciones Akal35853387
  • Publicado en 1921 / Edición de 2017 en español
  • Género: ficción del s. XX
  • Autoconclusivo
  • 200 páginas
  • Traductor: Julio Rodriguez Puértolas

La señora Dalloway relata un día corriente en la vida de Clarissa Dalloway, una dama casada con un diputado conservador y madre de una adolescente. La historia comienza una soleada mañana de junio de 1923, con un paseo de Clarissa por el centro de Londres, gran escenario de la novela, y termina esa misma noche, cuando comienzan a retirarse de casa de los Dalloway los invitados a su fiesta. Aunque en el curso del día sucede un hecho trágico: el suicidio de un joven que vuelve de la guerra, lo notable de la historia no es ese episodio, ni los pequeños sucesos y recuerdos que la componen, sino que toda ella esté narrada desde la conciencia de los personajes y del análisis de todo lo que pasa por sus mentes antes de actuar.

Solo tras la publicación de La señora Dalloway, los críticos comenzaron a elogiar la originalidad literaria de Virginia Woolf, su maestría técnica y su afán experimental, que introducía en la prosa novelística un estilo y unas imágenes hasta entonces más propias de la poesía.

Como ya sabéis si leísteis mi reseña de «Virginia Woolf, vida de una escritora» , me quedé con muchas ganas de leer dos de sus novelas, entre ellas esta, por eso cuando en el Club Pickwick se eligió como lectura de septiembre decidí no dejarlo más tiempo y aprovechar.

Con sus «pocas» páginas podríamos pensar que es un libro ameno, pero ya se sabe que a Virginia nunca se la lee rápido y aunque a mí, a diferencia de otras personas que he visto que se les ha hecho más tedioso, me ha resultado más entretenido de lo que pensaba, sí que da la sensación de ser un libro más extenso de lo que es realmente. Extenso pero no por profundo en su narración, si no por lo que cuenta sin contar y que uno mismo debe desentrañar. Yo he de admitir que lo he hecho a medias.

Bajo mi punto de vista, el gran punto fuerte de la novela es la forma que tuvo Virginia de pasar de una voz a otra sin transición alguna. Cualquier excusa es buena: un encuentro, oír el mismo sonido, ver la misma escena, presenciar el mismo acontecimiento, pensar sobre lo mismo o incluso sentir parecido.

Pero me surge una pregunta: ¿por qué Mrs Dallowey? Sí que es uno de los personajes más protagónicos, pero junto con otros como Septimus o Peter, o incluso la desesperada esposa de Septimus. Los dilemas de Mrs Dallowey son frívolos y poco profundos, como ella misma, acomodada en una vida superficial aparente acorde a todo lo que se suponía que tenía que ser en la época, solo se permite pequeños momentos de reflexión real, de cuestionamiento, aunque esto precisamente hace la lectura mucho más rápida. En contraposición nos encontramos con Septimus, teóricamente el otro gran protagonista de la novela, un hombre atormentado por un pasado traumático que le lleva a tomar una decisión drástica, y Peter, para mí el personaje más interesante, también anclado en el pasado y en lo que pudo ser pero nunca fue ni será.

Teniendo en cuenta que solo he leído esta novela y «Una habitación propia» de Virginia Woolf puede que no tenga razón en lo siguiente, pero creo que ambas son una buena manera de empezar con la autora, sus otras obras me da la sensación de que son más espesas y extensas, aunque tengo claro que algún día me animaré con alguna.

Mi valoración:

 

Asesinato en el Orient Express – Agatha Christie (libro y película)

  • Editorial RBA
  • Publicado en 1934 / Edición de 2003D509B94B-BBBD-41D9-8BDE-AB7FA72512D9
  • Género: novela negra / misterio
  • Colección Hércules Poirot #10
  • 208 páginas

En un lugar aislado de la antigua Yugoslavia, en plena madrugada, una fuerte tormenta de nieve obstaculiza la línea férrea por donde circula el Orient Express. Procedente de la exótica Estambul, en él viaja el detective Hércules Poirot, que repentinamente se topa con uno de los casos más desconcertantes de su carrera: en el compartimiento vecino ha sido asesinado Samuel E. Ratchett mientras dormía, pese a que ningún indicio trasluce un móvil concreto. Poirot aprovechará la situación para indagar entre los ocupantes del vagón, que a todas luces deberían ser los únicos posibles autores del crimen.

Una víctima, doce sospechosos y una mente privilegiada en busca de la verdad.

He de admitir que soy una de esas personas raras que le encanta la novela negra pero que no se habían leído este gran clásico del género…¡no os alarméis, tengo una excusa! Cuando me animé a empezar con la autora decidí leer su obra por orden cronológico de publicación (soy así de cuadriculada) así que leí sus tres primeros libros en muy poco tiempo y después hice una pausa larga hasta que vi por mi casa Trece Esferas y me salté el orden para leerlo. Y una vez que ya me lo he saltado ¿por qué no saltármelo otra vez para leer una de sus obras más valoradas como es Diez Negritos? ¿Y por qué no hacerlo de nuevo por Asesinato en el Orient Express ya que va a salir una nueva adaptación en el cine?

El libro me duró tres ratitos y me encantó. De hecho es el que más me ha gustado de Agatha Christie con diferencia (sin desmerecer a Diez Negritos que también me gustó mucho pero no tanto). La diversidad de personajes, la ambientación y el desencadenante (en este caso, cómo no podía ser de otra manera, un asesinato en extrañas circunstancias) te atrapan casi desde el primer momento. Nos encontramos en un tren con una serie de pasajeros muy diferentes y de muy estratos sociales, que una mañana se despiertan con el tren parado por una tormenta de nieve y un hombre muerto en uno de los compartimientos. En este tren viaja el famoso Hércules Poirot que se encargará de la investigación de este caso con su peculiar manera de interrogar y su estilo de deducción.

¿Quién miente y quién dice la verdad? Lo que parece claro es que todos tienen una muy buena coartada para el momento en el que parece que sucedieron los hechos y que nadie pudo entrar, matar y salir sin ser visto por ninguno de los pasajeros o de los encargados del vagón. A lo largo de la lectura iremos descubriendo y conociendo más sobre ellos, sospecharemos, nos equivocaremos o acertaremos pero, en cualquier caso, no podemos esperarnos el impresionante final que acompaña a esta historia. Es cierto que si algo caracteriza a la autora es su capacidad para complicar la situacion hasta un punto en el que casi necesitas un esquema para situarte y después presentar un final imprevisto en el que todo encaja, y con en este caso no solo lo hace sino que es uno de los finales que más me ha sorprendido de los que he leído.

Un indispensable para los amantes del género y de Agatha Christie, aunque yo no me arrepiento de haber tardado tanto en leerlo, en mi opinión sobre la película descubriréis por qué.

Mi valoración:

 

 

Mi opinión sobre la adaptación:

En este caso creo que hay que hacer una diferencia, como película me ha encantado pero como adaptación del libro hay algunas cosas que me han chirriado bastante, sobre todo porque creo que han sido cambios totalmente innecesarios.

Hay algunos pequeñas alteraciones en el orden de los sucesos y algunas escenas totalmente inventadas que quiero entender que se han añadido para darle contexto e intensidad a la historia. Pero lo que no puedo perdonar es el cambio en los personajes…sus personalidades, sus nombres y hasta sus nacionalidades ¿Hay que meter por narices a Penélope Cruz en el casting? Pues el personaje de la chica polaca se cambia por el de una mujer que podría ser portuguesa o brasileña (por el nombre) extremadamente religiosa.

Lo que sí le voy a conceder es el reconocimiento de ese espectacular final. Y para ello os tengo que contar cuales eran mis circunstancias: cuando fui a ver la película me quedaban entre veinte y treinta páginas para acabar el libro, justo en las que se resuelve todo, por lo que me presenté ante ella sin saber cómo acababa, y no sabéis cuánto me alegro. Solo puedo decir, para no adelantar nada a los que no se hayan leído la novela, que me emocioné y me maravillé. De hecho, nada más volver a casa lo terminé y me quedo, aun siendo en esencia el mismo desenlace, con el de la película. Increíble pero cierto.

En definitiva, tanto para los que que se han leído el libro como para los que no, recomiendo sin ninguna duda ir a verla al cine y disfrutar de dos horas de misterio.

Entrebrumas – Hope Mirrlees

  • 26EB7B88-2044-430D-95F5-79027F0D3376Editorial Roca (ficha en la web aquí)
  • Publicado en 1926 / Edición de Sep. 2017
  • Género: fantasía
  • Autoconclusivo
  • 288 páginas

Entrebrumas es una próspera ciudad mercantil situada en la confluencia de dos ríos. Años atrás, sus habitantes, amantes del trabajo y el orden, rechazaron la influencia alegre y caótica del País de las Hadas. Sin embargo, a la ciudad llegan de contrabando frutos del país vecino. Quienes comen estos frutos «prohibidos» sufren un acceso de alegría y creatividad y son expulsados de la ciudad y trasladados a una granja para su curación. Pero cuando el «mal de las hadas» afecta a un respetable colegio para señoritas y todas las jóvenes desaparecen, el alcalde, Nathaniel Chanticleer, se ve obligado a intervenir. Su investigación le llevará a descubrir una sórdida conspiración y deberá internarse en el misterioso País de las Hadas para encontrar a las jóvenes desaparecidas.

Creo que es la primera vez que tengo tan claro y tan rápido que voy a releer un libro, y esto no ocurre solo porque me haya gustado mucho, sino porque hay cosas que con las ganas de saber cómo se desarrollaba la historia he pasado más por alto de lo que se merecería y he de reconocer que no he acabado de entender.

Nos encontramos ante una obra de fantasía contextualizada en un país, Dorimare, y una época, que huye de todo lo que no es fundamentalmente práctico. La belleza, el arte, la fantasía…fueron elementos que, en un tiempo anterior al que se desarrolla esta historia, se relacionaron con sucesos y personajes que pudieron traer la desgracia a Dorimare. Concretamente se cree que los déspotas que gobernaban el país comían fruta de las hadas, una especie de droga que hace “perder” la razón a los que la consumen y que está prohibida. Pero esto no impide que siga llegando a las manos de personas inocentes y ansiosas de una vida más libre.

Los sucesos se desencadenan cuando tanto las pupilas de la escuela de niñas de la ciudad como el hijo del alcalde dan signos de haber probado esta fruta. Mientras las primeras desaparecen cruzando la frontera con el país de las hadas, el segundo es enviado a una granja bajo recomendación del médico, donde supuestamente se recuperará. Pero esta granja y sus habitantes guarda secretos muchos años escondidos, y es en este punto donde la magia se entremezcla con una trama más oscura.

Y es que esta es una de las características que más destaca en esta novela. Escenarios y personajes que desprenden alegría y magia y hasta, en muchas ocasiones, resultan tiernos, se acaban viendo envueltos en una situación de conspiraciones, asesinato, desapariciones…manteniendo su carácter inocente. De hecho, casi todo el libro aborda el problema desde el punto de vista de los que intentan averiguar qué está pasando y quién está detrás de todo. Pero ¿qué hay realmente después de la frontera con el pais de las hadas? Pues como ya digo, hay cosas que se me han escapado, y seguramente sea responsabilidad mía por mi necesidad de seguir con la historia y saber qué pasaba sin pararme a leer más detenidamente que me estaba diciendo realmente sobre este otro mundo.

Tiene todos los elementos para que si te gusta el género te lo leas en dos ratos: una trama que engancha y un desarrollo en el que no paran de pasar cosas, unos personajes, que aunque no se profundiza mucho en ellos, acabas cogiéndoles cariño, un escenario tan bien y tan justamente descrito que dan ganas de irse allí a vivir y la extensión perfecta para que se concluya la historia con un buen sabor de boca.

Se considera el precursor de la fantasía y para mí  se ha convertido en un clásico del género que no puedo estar más contenta de que haya llegado a mis manos. Es un cuento para adultos que he disfrutado y disfrutaré más veces, estoy segura.

Mi valoración:

Gracias a la Editorial Roca por el ejemplar

Rebeca – Daphne Du Maurier

  • Editorial DeBolsilloCBC4BC88-8C24-4AAE-B25E-826C35161258
  • Publicado en 1938 / Edición de
  • Género: misterio / ficción
  • Autoconclusivo
  • 462 páginas
  • Otros títulos de la autora: Mi Prima Raquel, Los Pájaros, La Posada de Jamaica

Nadie que conozca la película basada en esta novela podrá olvidar la voz en off que recita la frase inicial de la obra más lograda de Daphne du Maurier: Rebeca. Así comienzan los recuerdos de la segunda señora De Winter, que la transportan de nuevo a la aislada y gris mansión situada en la húmeda y ventosa costa de Cornualles. Con un marido al que apenas conoce, la joven esposa llega a este inmenso predio para ser inexorablemente ahogada por la fantasmal presencia de la primera señora De Winter, la hermosa Rebeca, muerta pero nunca olvidada. Su habitación permanece intacta, sus vestidos listos para ser lucidos y su sirvienta, la siniestra señora Danvers, aún le profesa una devoción malsana. Y con el espeluznante presentimiento de que algo maligno le está aprisionando el corazón, la joven comienza a investigar el verdadero destino de Rebeca: el oscuro secreto de Manderley.

Elegí leer este libro porque se alinearon los astros (en mi contra)…o más bien porque  al no gustarme el terror ni en películas ni en libros, cuando en el club Rebeca Reads se propuso esta lectura oscura que no llegaba al miedo y de una autora tan afamada decidí animarme. No sé si yo no estaba en el humor para leerlo sin saberlo o mis expectativas eran muy altas, pero me ha decepcionado bastante.

A diferencia de otras novelas, mi decepción con esta está muy localizada en dos aspectos. El primero es el ambiente oscuro y misterioso en el que supuestamente se desarrolla la historia, que yo no lo he visto representado más allá de en el personaje de la Señora Denvers e, incluso en este caso, tampoco ha sido para tanto. El otro punto son sus personajes principales. Hay personas a las que la protagonista les causa compasión por la situación en la que se encuentra en una casa enorme sin el apoyo de su nuevo marido, con las constantes comparaciones y desprecios por parte de vecinos y sirvientes y con el fantasma de Rebeca en su cabeza, pero a mí su personalidad hizo que me diese pena solo un rato, precisamente porque no tiene ninguna. Puedo entender que con su pasado, siendo acompañante de una señora que no la valoraba nada, llegue a Manderley con un perfil bajo, pero su sumisión autoimpuesta le lleva a gestionar como una niña pequeña las amonestaciones de los demás e incluso a justificar hasta los comportamientos más reprobables de su marido. Un marido que, aunque al principio intenté entender, se convierte en uno de los persones menos empático que he leído en mi vida, con comportamientos totalmente fuera de lugar, con una forma de dirigirse a la gente totalmente condescendiente y con un creencia de estar por encima de todo y de todos que imposibilitan sentir empatía hacia él.

Yo resumiría esta novela como una historia de obsesiones entrelazadas: la señora Danvers por Rebeca, el administrador de la finca Frank por complacer a los señores de la casa, la protagonista por su marido y este por controlarlo todo. De hecho, no creo que el desencadenante de los acontecimientos sea el amor de la una por el otro y viceversa. Mi teoría es que ella estaba desesperada por cambiar de vida y encontró en el señor Winter su solución, ya que además se parecía bastante, en principio, al caballero que toda señorita quería tener al lado, y este solo buscaba una mujer florero que le adornase la mansión y las noches.

Lo que sí hay que reconocerle es la calidad narrativa que le otorga a la historia la pluma de la autora, y por lo que me atreveré seguramente en algún momento con otra obra suya, y con un final bastante inesperado.

Mi valoración:

 

Tiempos Difíciles – Charles Dickens

  • Editorial Alianza17725574
  • Publicado en 1854 / Edición de 2013
  • Género: ficción / crítica social / clásico
  • Autoconclusivo
  • 464 páginas

En Coketown, trasunto de cualquier ciudad industrial de la Inglaterra victoriana, el rígido y práctico director de escuela Thomas Gradgrind y su socio, el presuntuoso y mezquino empresario Josiah Bounderby, imponen su ley y su estrecha y árida visión de la vida a alumnos y obreros, cada uno en su ámbito. A través de la entretenida trama de Tiempos difíciles, que entremezcla las vidas y peripecias, ilusiones y desdichas de estos y otros personajes, como los hijos de Gradgrind, Tom y Louisa, y su compañera Sissy Jupe, o el obrero Stephen Blackpool, Dickens expresa que no hay acción sin consecuencia, pero que la esperanza siempre es posible.

Tiempos Difíciles Esta ha sido mi primera lectura con el Club Pickwick y la primera del autor que consigo terminar, pero esto es responsabilidad totalmente mía porque intenté hace muchos años leer La Pequeña Dorrit y no lo conseguí. Los libros tienen su momento y no era el suyo; sin embargo, y a pesar de algunos  «peros» este sí ha sido el de esta otra obra.

Es cierto que el primer tercio se hace muy pesado y es más difícil conectar con lo que el autor pretendía hacernos ver, pero es una parte que al terminar se hace totalmente necesaria ya que es donde se nos muestra en toda su magnitud las creencias basadas en que lo único importante es lo real, lo que se puede tocar, en las que se basa la crítica fundamental que se hace en la novela y de la que partirá todo el desarrollo posterior de los personajes.

Estos personajes son, sin duda, el gran valor del libro. Quizá no se llega a conocerlos en profundidad porque se centra casi exclusivamente en la parte de su personalidad que está a favor o en conflicto con la creencia antes mencionada, pero en esta historia a mí me resulta suficiente. Hasta los que pueden causar más rechazo se disfrutan por lo surrealista de sus pensamientos (y a la vez real en una época en la que lo material se empieza a imponer a lo emocional) llegando en algunas ocasiones a lo cómico satírico, como ocurre con Bounderby y la señora Sparsit que vive con él y le «asiste» de diferentes maneras a lo largo de la historia, eternos infelices que necesitan expandir su insatisfacción a los que les rodean.

A estos les acompañan el señor Gradgrind, un hombre que cría a sus hijos en esta pedagogía de que lo importante es lo que te beneficia el bolsillo, no el alma, y que es el personaje que presenta mayor evolución a lo largo del libro. Esto ocurre gracias al impulso que le da su hija, Louise, sometida a esta educación hasta que un día no aguanta más. Al contrario que ocurre con su hermano, Thomas, acomodado en ella, mimado por todos, aprovechado y sinverguenza.

Hay otros personajes secundarios cuya importancia radica sobre todo en que nos ayudan a ver en todo su esplendor a los principales, como el desgraciado y maltratado Stephen Blackpool o la frívola señora Gradgrind. La única decepción se la otorgo a Ceci Jupe, que aparece al comenzar el libro cuando su padre la abandona en el circo y es adoptada por los señores Gradgind y se convierte en la representación de la virginalidad, la inocencia y la incultura, convirtiéndose en la muestra de que la felicidad no se alcanza como los demás creen. Pero más allá de eso, la que pensaba que iba a ser una de las protagonistas me ha dejado fría.

También nos encontramos la crítica a la creencia de algunos afortunados de cuna de que absolutamente todo en la vida debe girar en torno suyo, justificando hasta los comportamientos más atroces por el simple hecho de ser señores, como casar a una chica con alguien que aborrece porque puede a través de ella beneficiarse social y económicamente, y la falta de empatia de estos mismos con las personas pobres y trabajadoras, horrorizándose cuando reivindican unos derechos mínimos.

Es una novela que si consigues pasar esa primera parte demasiado lenta y te gusta el estilo del autor se disfruta, ya que va cogiendo ritmo poco hasta que al final acabas con la sensación de haber leído un muy buen libro. A pesar de que no lo recomiendan como primera lectura del autor en mi caso sí ha sido así y me alegro porque ahora estoy preparada para seguir disfrutando otras.

Mi valoración:

 

 

Kokoro – Natsume Soseki

  • Editorial Gredos
  • Publicado en 1914 / Edición de 2009IMG_0212
  • Género: ficción clásica japonesa
  • Autoconclusivo
  • 327 páginas

Kokoro, la obra maestra de Soseki, es la recreación penetrante y desgarradora de la complejidad moral existente en las relaciones humanas donde hay tanto que queda sin decirse, incluso en los ámbitos más íntimos. En este sentido, los silencios de la obra, más elocuentes que las palabras, y las alusiones indirectas, sirven de puente al corazón de las cosas y de las personas. Un corazón observado tanto desde la especial perspectiva de la cultura japonesa, como desde la condición humana en general.

Siempre he defendido que la crítica hacia una novela tiene que tener en cuenta el conexto espacial y temporal en el que fue escrito, incluyendo de esta manera la situación política y social tanto del autor como del momento en el que se desarrolla la trama. Pues bien, en este libro esto cobra especial importancia, ya que el final del siglo XIX fue para Japón una época de cambios trascendentales, de apertura al resto del mundo, en la que existían grandes conflictos generacionales entre la persona criada en la cultura clásica japonesa y la nacida en un mundo que le anima a expresarse y a ser práctico.

Todo este contexto del autor y de la obra está perfectamente explicado en el prólogo de la edición que yo he leído y que recomiendo, ya que es un valor muy positivo que ayuda a entender mucho más tanto a los personajes. Eso sí, hay una parte centrada en el análisis de la novela en sí misma que recomiendo leer al terminar de leerla, ya que nos enteraremos de situaciones importantes e inesperados, eliminando así el factor sorpresa. Es cierto que los giros argumentales no constituyen su valor, pero estoy segura que la hubiese disfrutado incluso más si no hubiese sabido algunas de las cosas antes de lo que el autor decidió.

Esta novela se divide en tres partes con capítulos muy cortos bien diferenciadas. En la primera conocemos a un chico originario de la clase media alta rural japonesa que estudia en Tokio y que un día se encuentra a un señor al que encuentra muy diferente del resto de ciudadanos que le rodean. A partir de entonces su objetivo será conocerle hasta el punto de ser un habitual en su casa, pero este conocimiento será muy profundo, por lo que significará para él, y a la vez muy superficial, ya que Sensei (maestro) siempre habla con verdades veladas, sentencia sin explicar, se muestra y se esconde tras un halo de misterio…siendo así hasta para su esposa y acompañante casi exclusiva de vida. Así pasan el tiempo entre conversaciones y paseos hasta que nuestro narrador tiene que volver a casa debido a la enfermedad de su padre, empezando así la segunda parte de la novela, mucho más corta que las otras dos. Además de conocer a su familia y parte de la idiosincrasia de las familias japonesas de la época en general veremos su frustración por el sentimiento de lejanía respecto del que él considera su maestro en la vida.

Y por fin llega el que yo considero gran valor de la novela, su tercera parte en forma de carta de Sensei al muchacho que le venera. En ella le contará la historia de su vida incluidas las razones por las que un hombre lleno de vida como él se convirtió un día en el ermitaño que ahora conoce. Pero no solo se nos desvelará sus secretos sino que también podremos ver la comparativa de valores tan característica entre el maestro en su juventud y el aprendiz, comentada al principio de la reseña y que le da mucho más sentido a la necesidad de esa primera parte más lenta y pasiva.

Es una muy buena opción para iniciarse en la literatura clásica japonesa. Al menos yo lo he hecho así y estoy bastante contenta, deseando adentrarme más en ella.

Mi valoración:

 

El Cuento de la Criada – Margaret Atwood

  • Editorial SalamandraCuento de la criada, El_135X220
  • Publicado en 1985 / Edición de 2017
  • Género: ficción / distopia / feminismo
  • Autoconclusivo
  • 412 páginas

El cuento de la criada, una de las novelas más célebres y prestigiosas de Margaret Atwood, constituye una mirada futurista a una sociedad totalitaria. Una mirada terrible y lúcida que denuncia la barbarie que pueden llegar a alcanzar los puritanismos extremos de toda índole y las ansias de dominio sobre los seres humanos privados del ejercicio del derecho a la libertad.

En el estado de Gilead, donde tras una hecatombe nuclear, la población ha visto disminuida su capacidad de reproducción, las Criadas, vestidas con hábitos rojos de la cabeza a los pies, con el rostro cubierto por un velo transparente y enmarcado por una toca blanca, desempeñan una función esencial: concebir y dar a luz a futuros ciudadanos. Destinadas a esta empresa suprema, viven enclaustradas y reducidas a ser un cuerpo con una única misión: reproducirse.

Esta es una de las reseñas más difíciles que voy a tener que hacer, por ello no la voy a alargar mucho y os voy a dejar un vídeo del canal de booktube Libros de Maria Antonieta, con cuyas opiniones estoy en este caso, muy de acuerdo, y abarca todos los aspectos de la novela.

El libro se fundamenta en una nueva, aunque nos suene a antigua, organización social en la que el objetivo fundamental es la procreación. Para esto hay que hacer uso de uno de sus recursos más preciados y a la vez más mal tratados: la mujer. Pero no cualquier mujer, sino la mujer fértil, llamada criada, que en este mundo postcatástrofe no abunda. Las demás mujeres, en función de su estatus social tendrán diferentes papeles: Esposa de Comandante y futura madre de los hijos que conciba su marido con la criada; Martha, encargada de el cuidado de la casa y la cocina; Tía, responsable del acondicionamiento psicológico de las futuras Criadas, etc. Y si no estás de acuerdo y no quieres cumplir la función que te ha tocado te envían a unas reservas en las que, bajo pésimas condiciones, la mayor aspiración acaba siendo la muerte.

La historia comienza con Deffred recién llegada a su nueva casa con la nueva familia (yo diría dueños) a la que tiene el deber de honrar con un hijo. Hasta que lo consiga tendrá que soportar vejaciones y violaciones que son aceptadas por todos en esta nueva sociedad, pero son lo que son, aunque no se grite y no se pida ayuda. De hecho, el grito en silencio de estas mujeres es lo que la autora nos cuenta a lo largo de las páginas a través de la protagonista. Veremos qué y cómo piensa y siente y sus expectativas, que después de salir del centro de acondicionamiento, son mínimas y conformistas, y a medida que pasa el tiempo aumentan, provocando que realice pequeños actos de rebeldía que podrían costarle muy caro. Porque el Comandante y su Esposa son dueños de su cuerpo pero no de su mente. Una mente que viajará al pasado para mostrarnos su vida de antes, tanto cuando era todo lo libre que somos en nuestra realidad actual, como en el centro con las Tías.

Los flashbacks a lo largo del libro son escenas que, al menos a mi, me producían mucho agobio por las similitudes con nuestra situación hoy en día, en la que estamos en una constante batalla de poderes y en la que hay personas que utilizan como excusa la religión musulmana como excusa para arrasar ciudades llevándose por delante a miles de personas. Podría decirse que esta historia es una de las futuras opciones posibles a lo que está pasando. ¿Cuál es la solución de los altos poderes de esta sociedad distópica? Refugiarse en la religión. En una religión que subyuga a las mujeres, dándoles pequeños privilegios para que no se revolucionen ante la pérdida absoluta de su libertad ¿no os suena la frase «podría ser peor?

«Quisiera saber qué Te propones. Sea lo que fuere, por favor, ayúdame a superarlo. Aunque tal vez esto no sea cosa Tuya; no creo ni remotamente que lo que está ocurriendo aquí sea lo que Tu querías» Deffred hablándole a Dios.

Otras escenas que se leen con el ceño muy fruncido y que si fuesen película apartaríamos la vista son las ya mencionadas violaciones y los partos. No porque sean explícitos en cuanto al proceso fisiológico, si no por todo lo que rodea al momento. Y es que este no es un libro fácil de leer, ni mucho menos, pero es un libro que hay que leer, para no cometer los errores del pasado ni los que podemos tener tendencia a cometer.

«El problema no sólo lo tenían las mujeres, dice. El problema principal era el de los hombres. Ya no había nada para ellos.

¿Nada?, pregunto; si tenían…

No tenían nada que hacer, puntualiza.

Podían ganar dinero, replico en un tono algo brusco. […]

No basta, dice. Es demasiado abstracto. Me refiero a que no tenían nada que hacer con las mujeres.» Conversación entre Deffred y el Comandante

En cuanto a los personajes, cuesta entender a unos más que a otros, pero al final lo que los caracteriza a todos es el conformismo, de unos más que de otros. Al contrario que en otras distopias, juveniles sobre todo, en esta no hay grandes facciones rebeldes que luchan contra el orden establecido desde el principio con todas sus fuerzas, sino que nos encontramos con personas que aparentemente han aceptado lo que ha venido pero que buscan, poco a poco, una huida, dándole más realismo a todo. Incluso con Deffred a veces es complicado empatizar, pero supongo que si estuviésemos en su situación cometeríamos esos errores y muchos más. Uno de los que más duelen leer es como las mujeres dirigen sus ataques contra otras mujeres: nosotras nos buscábamos todo lo malo que nos pasaba por como éramos, cómo nos manifestábamos e incluso como nos vestíamos ¿os vuelve a sonar?

«Sí, aceptan encantadas situaciones que les conceden poder sobre otras mujeres, incluso -y hasta puede que especialmente- en sistemas que por lo general conceden escaso poder a las mujeres: sin embargo, todo poder es relativo y en tiempos duros se percibe que tener podo es mejor que no tener ninguno.» (Prólogo El Cuento de la Criada)

Si algo caracteriza al ser humano es que es tan fuerte en determinadas situaciones como en otras lo es débil, y aquí se ve muy bien.

Os animo mucho a que veáis el video-reseña que os mencioné antes y otros de la misma booktuber sobre literatura feminista: https://youtu.be/CaS7VG5DIL8

Mi valoración:

 

Un Mundo Feliz – Aldous Huxley

  • 9788497594257Editorial DeBolsillo
  • Género: ficción / distopía
  • Publicado en 1932 / Edición de 2005
  • 256 páginas

Un mundo feliz es un clásico de la literatura de este siglo. Con ironía mordiente, el genial autor inglés plasma una sombría metáfora sobre el futuro, muchas de cuyas previsiones se han materializado, acelerada e inquietantemente, en los últimos años. La novela describe un mundo en el que finalmente se han cumplido los peores vaticinios: triunfan los dioses del consumo y la comodidad, y el orbe se organiza en diez zonas en apariencia seguras y estables. Sin embargo, este mundo ha sacrificado valores humanos esenciales, y sus habitantes son procreados in vitro a imagen y semejanza de una cadena de montaje.

En un mundo en el que el control de lo que eres, tienes y hasta sientes es la base de la estabilidad y en el que se hará lo que sea para mantenerla ¿habrá alguien dispuesto a desafiar el orden impuesto en pro de la libertad?

Esta nueva sociedad ambientada en un Londres ficticio del año 2540 se divide en castas muy especializadas (Alfas, Betas, Gammas, Deltas y Epsilons), desde las que corresponden a las personas más inteligentes destinadas a trabajos más cómodos pero con mayor responsabilidad, hasta aquellos que viven para trabajar sirviendo a los demás casi como esclavos. Pero la pertenencia a una u otra no se debe ni a herencia familiar ni a los propios méritos. De hecho, en este nuevo mundo no existen las madres; las nuevas generaciones se crean en probetas y se desarrollan en «fábricas» hasta que se les considera  preparados para realizar la actividad para la que han sido concebidos. Y es que toda su vida está dirigida a un objetivo: trabajar y ser útil a la sociedad para mantener la estabilidad.

A través de la manipulación genética y más tarde cuando son ya embriones van pasando por una serie de fases en las que se modifica su organismo para que cada uno sea completamente apto para una tarea en concreto y no para otra. A esto se le añade lo que el autor llama acondicionamiento hipnopédico, y que consiste en hacer desde que son bebés que escuchen miles de repeticiones mientras duermen de las premisas sobre las que se asienta esta sociedad. Con esto consiguen que se conformen con el papel que les ha tocado y ni se planteen cuestionar su vida. Y cuando sienten que se alejan un poco de esos valores tienen una droga llamada Soma que les hace ser infinitamente felices y olvidar aquello que les hace pensar de más.

«Y he aquí – dijo el Director sentenciosamente – el secreto de la felicidad y la virtud: amar lo que hay obligación de hacer. Tal es el fin de todo el acondicionamiento: hacer que cada uno ame el destino social, del que no podrá librarse.»

[…]

«-Fui y seré me ponen triste – recitó ella – tomo un gramo y solo soy»

Pero hay alguien que sí lo hará. Nuestro protagonista, sospechoso de ser víctima de un fallo durante su creación, no se siente parte de su casta de origen por su aspecto físico, pero tampoco de la casta inferior. Tiene sentimientos más parecidos a los de nuestra realidad, no se conforma con acostarse con cientos de chicas, como es lo natural ahí, porque le gusta una en concreto, no asume la jerarquía social como algo inmutable, tiene curiosidad por la sociedad anterior a su era…

Pero esta novela no trata de una gran héroe que rompe con lo establecido y lleva al mundo a la salvación y la libertad, ni es una historia de amor épica en contra de los valores de la sociedad. Es la lucha de un hombre por demostrarse a sí mismo que hay otra forma de vivir, es la búsqueda de la libertad como ser individual…y es la narración de cómo todo esto se le va de las manos.

«Prefiero ser yo mismo – dijo – yo mismo y amargado. Y no otro y alegre.»

En contra de lo fascinante que me pareció el mundo creado por el autor y de la premisa de la que parte la trama, los personajes me han parecido muy superficiales y el desarrollo de los acontecimientos no me ha convencido tampoco. Pero es que creo que el objetivo del autor no era engancharnos a una historia, era explicarnos su visión de un posible mundo futuro y hacernos pensar. De hecho, me parece increíble que ya hace casi 100 años alguien fuera capaz de ser tan visionario, porque aunque evidentemente hay grandes diferencias, hay características y valores que no creo que estén tal alejados de nuestra realidad actual.

Para mí ese es el valor del libro, que te hace reflexionar ¿aceptarías una vida cómoda pero sin sentimientos ni libertad aunque esos sentimientos incluyan los buenos y los malos? Una vida en la que no existen los rodeos, un camino directo siendo joven y sano hasta que llega la muerte a la edad establecida, sin aventuras ni emoción, pero sin decepciones tampoco.

Una clásico digno de leer, yo diría hasta necesario.

Mi valoración:

«-Pero es que me gustan los inconvenientes.

– Pues a nosotros no – dijo el Inspector -. Preferimos hacer las cosas cómodamente.

– Pero yo no quiero la comodidad. Yo quiero a Dios, quiero la poesía, quiero el verdadero riesgo, quiero la libertad, quiero la bondad. Quiero el pecado.

-En resumen – dijo Mustafá Mond – usted reclama el derecho a ser desgraciado.

-Bueno, vaya – dijo el salvaje – reclamo el derecho a ser desgraciado.

-Sin hablar del derecho a envejecer y volverse feo; el derecho a tener sífilis y cáncer; el derecho a tener poco que comer; el derecho de ser piojoso; el derecho a vivir en constante inquietud por lo que ocurrirá mañana; el derecho a pescar la tifoidea; el derecho a ser atormentado por indecibles dolores de todas clases.

Siguió un largo silencio.

-Los reclamo todos – dijo por último el salvaje.»

El Color Púrpura -Alice Walker

  • 4563527Editorial Ediciones Orbis / Colección Biblioteca Grandes Éxitos / Novelas de cine
  • Publicado en 1982 / Edición en español de 1987
  • Género: ficción
  • Autoconclusivo
  • 256 páginas

El color púrpura, cuenta, a lo largo de distintas décadas, la intensa vida de Celie, una mujer de la América rural del Sur forzada a casarse con un hombre brutal. Celie se retrae y comparte su desgracia sólo con Dios.

Celie sufrirá una transformación gracias a la amistad que comparte con dos extraordinarias mujeres, adquiriendo la autoestima y la fuerza que necesita para perdonar.

Celie le escribe a Dios porque es al único al que puede hacerlo sin miedo, porque es el único que cree que le puede escuchar. Habiendo sido victima de abusos por parte de su padre y casada con un hombre violento piensa que esa es la vida que le ha tocado y que debe aceptar y resignarse, pero a lo largo de los años conocerá a personas que le confirmarán que la humanidad puede ser muy cruel pero también a otras que le harán confiar en que hay un mundo mejor si no se rinde. Entre estas últimas están Sofía y Shug, dos mujeres valientes cada una en su estilo que enseñarán a Celie a no conformarse, a pegar un golpe sobre la mesa y no dejar que los hombres la traten como un un objeto sin valor.

«Tienes que luchar, Celie, me dice. Yo no puedo hacerlo por ti. Tienes que luchar tu misma. Yo no contesto. Pienso en Nettie, muerta. Ella luchó y se escapó. ¿Y para qué? Yo no lucho, yo me quedo donde me mandan. Pero sigo viva.»

Sofía es la mujer del hijo de su marido y vive con la creencia de que antes de que tu me golpees te golpeo yo. No dejará que nadie le diga lo que puede o no hacer y guarda un rencor absoluto a las personas blancas, así que cualquiera que la intente amaestrar como si fuese un animal tendrá que vérselas con su genio o incluso con su abandono.

«He tenido que pelear toda la vida, me dice. Pelear con mi papá, con mis hermanos, con mis primos y con mis tios. Una chica no está segura con tantos hombres en la familia. Pero nunca pensé que tendría que pelear en mi propia casa. Quiero a Harpo, dice suspirando, bien lo sabe Dios. Pero antes que consentir que me pegue, lo mato. Ya lo sabes, si quieres un hijastro muerto sigue aconsejándole así. Se pone la mano en la cadera. Yo he cazado con arco y flechas, me dice.»

Shug es una cantante de bares muy conocida y amante del marido de Celie que compartirá con ella más que un hombre. Por una enfermedad se ve obligada a vivir bajo el mismo techo que ellos y poco a poco irán conociéndose. Lejos de sentir lástima por ella cuando se entera de cómo trata su amante a Celie, Shug la impulsará a salir de esa situación y a luchar por sí misma.

Celie pasará su vida luchando entre lo que siente y lo que quiere y lo que ella cree que tiene que ser. Conocer a estas dos mujeres le dará en impulso necesario para parar de dejarse llevar por lo que siempre le han dicho sobre como tiene que ser la vida de una mujer negra.

«Nettie pronto me dejó atrás en lo de estudiar. Y es que nada de lo que me decía se me quedaba en la cabeza. Un día quiso convencerme de que la tierra no era plana. Eso ya lo sé, le contesté. Pero no le dije lo plana que yo la veía.»

Reseña:

Cuando decidí escoger esta  novela como mi próxima lectura sabía que lo que me iba a encontrar era un libro con temas tan controvertidos para la época como el racismo, la homosexualidad femenina y la violencia de género y de hecho fue la razón por la que la escogí. Con esta base y un premio Pulitzer me esperaba una historia que me conmoviese y me removiese por dentro, y aunque en ocasiones haya sido así y nos encontremos frases y fragmentos dignos de mención, en general me ha dejado un poco fría comparado con lo que yo me esperaba.

Es una novela de lucha, en la que las mujeres son las grandes protagonistas. Mujeres que, a veces conscientemente y a veces sin intención, impulsan a otras a conseguir sus sueños, o al menos una vida mejor lejos de la violencia; y esto como trama me gustó y me alegré de haber leído el libro cuando lo acabé, pero mientras lo estaba leyendo me costaba meterme en la historia. Y tengo claro por qué.

Es la primera novela epistolar que leo pero esto no ha restado puntos. Lo que si lo ha hecho es la narración. Al estar construida por cartas es la propia Celie la que, evidentemente, las escribe, por lo que la construcción de las frases es demasiado simple, dando la sensación de que están escritas por una niña. Doy por hecho que esto es un recurso que la autora ha utilizado conscientemente para hacer más creíble que están realmente escritas por una mujer inculta como es Celie pero en mi caso ha jugado en contra.

Algo parecido me ha pasado con los personajes femeninos (porque de los masculinos solo puedo decir que no me caen bien y que su evolución no me es creíble), aun gustándome mucho y entendiendo que no puedo juzgar las decisiones y pensamientos de estas desde mi perspectiva de mujer del siglo XXI, había veces que no las entendía y hasta cerraba el libro enfadada. Pero como valoración general, es un libro que me ha gustado y que me ha hecho seguir conociendo la crudeza y lo dura que puede llegar a ser la vida solo por tu color de piel o tu género y, por otro lado, el valor de la lucha.

«Yo te maldigo.

¿Qué quieres decir con eso?

Hasta que te portes bien conmigo, todo lo que toques se te volverá polvo entre las manos.

¿Quién te has creído que eres?, me pregunta riendo. Tú no puedes maldecir a nadie. Mírate. Eres negra, eres pobre, eres fea, eres una mujer. Vamos, que no eres nada.

[…] Soy pobre, soy negra, puede que fea y no sé guisar, dice una voz a todo el que quiera oírla. Pero aquí estoy.

Amén, dice Shug. Amén, amén.»

Mi valoración:

Película

Me animé al poco de terminar el libro ha ver la película para ver si al poner movimiento a los personajes me emocionaba más, y así ha sido, aunque tampoco mucho más. Es una película muy larga y a veces me dieron ganas de parar y dejarla pero al final mereció la pena verla y hasta lloré un poquito.

Los personajes buenos están reinventados para quitar casi todas esas partes que pueden ser reprochables en el libro y los odiosos son igual de odiosos porque es difícil hacerlos más malos. Me ha faltado profundidad en algunos, como Sophie, que ha pagado el pato de la adaptación a la gran pantalla.

En conclusión, ha ganado en desarrollo de la trama pero ha perdido en personajes, así que mi valoración es la misma que la del libro.

 

Los Misterios de Udolfo – Ann Radcliffe

  • los-misterios-de-udolfo1Editoral Valdemar
  • Publicado en 1794
  • Edición de 2012
  • Género: ficción gótica
  • Autoconclusivo
  • 736 páginas

Los misterios de Udolfo» se desarrolla en el siglo XVI, y está ubicada en Francia e Italia. Emily, como todas las heroínas de la Radcliffe, se enfrenta a las adversidades y desastres provocados por Montoni con la fuerza de la racionalidad, después de haber sucumbido momentáneamente a la superstición. La persecución del malvado Montoni tiene lugar en el castillo de Udolfo, donde acontecen múltiples fenómenos sobrenaturales: vagas figuras extrañas, un fantasma en las almenas, sepulcrales voces misteriosas…

Conocí este novela cuando leí Northanger Abbey de la gran Jane Austen, en la que la protagonista lee  Los Misterios de Udolfo y cual Quijote inglés se empapa de sus misterios y los transfiere a su vida real, otorgándole cualidades fantásticas a los castillos y personalidades oscuras a la gente que va conociendo. Y pensé que si mi autora favorita clásica había decidido darle esa importancia en una de sus obras yo debía leerla. Y lo conseguí, pero al segundo intento.

Ahora pienso que la primera vez que la empecé no estaba preparada para disfrutar de ella. Es una novela que requiere que nos quitemos prejuicios y vicios de la literatura contemporánea. Hay que leerla y valorarla por lo que es, una novela escrita hace más de doscientos años, con un ritmo acorde a la vida de la época, con una trama fundamentada en valores muy arraigados y en una sociedad clasista y donde el hombre ordena y la mujer agacha la cabeza y obedece (aunque se note ya la necesidad de libertad y autodeterminación de la mujer en el papel de la protagonista).

Emily es una joven que se queda huérfana durante un viaje por el sur de Francia quedando a merced de la voluntad de la hermana de su padre cuya tutela ha aceptado no precisamente por causas altruistas. En aquel viaje conoce al que cree el amor de su vida y al que su tía acepta cuando conoce su posición social, pero todas sus ilusiones se rompen cuando esta se casa con Montoni, un hombre oscuro, manipulador y cruel que hará lo que considere necesario para conseguir hacerse con las propiedades de las dos mujeres, aunque eso incluya trasladarse al último rincón de Italia, a un castillo que convertirá las peores pesadillas de Emily en realidad. Con la vida tranquila que siempre ha llevado nunca se podía imaginar las aventuras que tendría que vivir hasta alcanzar su verdadero destino.

«-Hablas como una heroína -dijo Montoni airado- , veremos si puedes sufrir como una de ellas.»

Es un libro que se lee a fuego lento, sobretodo por las descripciones de paisajes, que pueden alargarse casi un capítulo completo, que hace cuando la protagonista esta viajando, cosa que ocurre muchas veces, por eso yo recomiendo alternarlo con otro de más fácil lectura y prosa más sencilla, ya que también nos encontramos con frases muy largas y con un lenguaje bastante complejo, incluso en los diálogos. A cambio, en los pasajes centrados en el misterio si se consigue meterse en la historia y el final acaba encajando y sorprendiendo a la vez.

No es una novela que se pueda recomendar a un público general, ya que la mayoría lo dejaría antes de las primeras 100 páginas, como hice yo la primera vez. Que Jane Austen la mencione en una de sus novelas tampoco significa que a todo el mundo que le guste su estilo vaya a disfrutar de esta porque hay bastante diferencia entre el estilo de la primera y de la segunda, pero creo que es un buen punto de partida. Si superas el primer viaje de Emily con su padre es casi garantía de que acabará gustándote porque después es cuando empiezan a pasar cosas interesantes.

«Sin duda -dijo-, hay algo mágico en la riqueza que hace que las personas se inclinen ante ella cuando ni si quiera les beneficia. ¡Qué extraño es que un loco o un bribón, si son ricos, sean tratados con más respeto por el mundo que un buen hombre o un sabio que sean pobres!»

Mi valoración: